Congreso por una Cuba mejor.

El VI Congreso del Partido Comunista en Cuba desperta interés en el archipiélago y fuera de él. Los principales medios informativos del universo hacen referencia al mismo independientemente de sus puntos de vistas e ideologías. Para los cubanos sería descabellado que no provocara una atracción extraordinaria.

Como profesional he ofrecido tratamiento al tema empleando diversos géneros y ahondando en personas de variados estatus para retroalimentarme, para ofrecer el palpitar social de mi pueblo y para hacer pensar, ese gran aspecto que no puede quedar olvidado. Es la mayor gran diferencia con el reino animal.

En mi avatar periodístico entrevisté a Adela Alsina del Toro, Presidenta del Tribunal Popular Municipal en Banes y hablamos en un tórrido mediodía sobre la magna cita partidista. Fue un diálogo franco y agradable en su oficina. Me transportó a través del tiempo y los recuerdos a su inicio como educadora, me hizo sentir el amor que profesa por la enseñanza y por los niños y luego me explicó la necesidad de incursionar en las leyes, desde donde hoy también educa a los individuos y a la sociedad bajo la égida que de una mala enseñanza provienen acciones desfavorables. Para Adela proteger a la sociedad es uno de las metas constantes en su existencia.

Y en ese diálogo no faltó hablar sobre el tema del VI Congreso del Partido en Cuba:

“Periodista: ¿Cómo lo siente, cómo le llega?

Adela: Necesario. El proyecto de lineamientos fue analizado y el pueblo aportó muchas cosas. Todos debemos de prepararnos para poder cumplir lo que se apruebe en el Congreso. Hay que cambiar la mentalidad, porque son otros los escenarios en lo económico y en lo social donde nos moveremos. Ya el tiempo pasa y los dirigentes históricos dan paso a la juventud. En sus manos está el futuro de la Revolución.

Siempre la juventud ha dado el paso al frente, fíjate cuando el Moncada, la lucha contra Batista, la ayuda internacionalista en Angola. Yo soy fiel defensora de que la juventud recogerá esas banderas y las llevará adelante.

Periodista: En la autopreparación para esta entrevista leía un planteamiento donde decía que la burocracia, las ilegalidades y la malversación constituyeron los sepultureros de la Unión Soviética. ¿En Cuba podrá ocurrir lo mismo?

Adela: No. En Cuba no va a ocurrir lo mismo. Mira no podemos soslayar que existe determinado grado de corrupción, gente simuladora, que aparenta ser una cosa y es otra, gente que se aprovecha de determinados bienes que les ponen en las manos para beneficio personal, pero eso existe en todas las sociedades, siempre, sin embargo en Cuba es mucho menor y se trabaja contra ello, existe un proceso de rescate de valores en la juventud, en la escuela, el barrio, las instituciones. Hay que sentir el latir del pueblo y hacer cumplir la ley.

Periodista: ¿El futuro para usted?

Adela: El futuro para mí? Seguir luchando por la Revolución donde quiera que me encuentre. Así, como pienso yo, piensa nuestro pueblo”.

Palabras seguras para un final. No hacía falta más, no más preguntas, lo que me decía estaba acuñado por convicciones puestas a pruebas duras, fueron expresiones salidas de un carácter recio pero no ausente de humanismo, de amor hacia la justicia y lo hermoso, moldeado por una sonrisa que puede suceder al llanto ante la ternura que suele entrar a su corazón de banense auténtica. Gracias Adela, vivamos el Congreso.